jueves, 17 de noviembre de 2011

La guitarra abandonada.

Se sentía la más querida del mundo. La más preciada. Pensaba que no había ninguna en ese mundo más afortunada. Y todo por tenerle cerca. No había momento mejor que cuando le rodeaba con los brazos, y la acariciaba, con delicadeza, con elegancia, cada día mejor. Eran él y ella, sin necesidad de más. La perfección de la manera más simple.
Todos los días ella le esperaba con impaciencia en la esquina de su habitación, esperando con anhelo que él volviera a arrimarse, a tocarla.
Pero esa suerte, como todos saben, no duró para siempre. (Eso ya es algo imposible para los mortales, se sabe de sobra que no puedes pedirnos nada eterno).
El caso es que, ella ya lo sabía, desde el comienzo de ese frio viernes de Noviembre. Cuando se dirigió a ella, todo le pareció diferente. ¿Las ganas? ¿Dónde se dejo las ganas? ¿El deseo? ¿La magia? Lejos, lo notaba lejos, con una distante mente, lejos de aquella habitación antes cubierta de alegres canciones que habían significado tanto para ella. Y entonces, apareció la otra.
Era un día normal, un viernes cualquiera, pero lo cambió todo.
Ella le esperaba en la esquina de siempre, impaciente, deseando sentir sus manos recorriéndola, creando esas melodías que solo ellos podían alcanzar.
Pero, ese día ella se dio cuenta de una cosa.
En cuanto él apareció en la habitación, dándola la mano con la dulzura que solo le había regalado a sus cuerdas, sintió como en cualquier momento se derrumbaba. Si tuviera corazón, acababa de partirse.
Se dio cuenta de que él prefería la risa de aquella desconocida a cualquier solo que ella pudiese crear.
Y entonces, comenzó a lamentarse, poco a poco, mientras observaba como él acariciaba a su nueva compañera como nunca había rozado su mástil.




Porque, por muy perfecta que le parecida el sonido que conseguía emitir, jamás podrá compararse con esa risa…

6 comentarios:

Lemon dijo...

Me quedo sin palabras cada vez que te leo <3

agus; dijo...

Escribes muy, muy bien. Me encantó.
Un beso desde ► Wolves howling to the moon.

Elisa Sestayo dijo...

PRECIOSO!! Al principio pensé que hablabas de una mujer! :P
Besos <3

dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
dijo...

Me ha gustado mucho el texto,es muy ingenioso.Yo también pensé que al principio era una chica y no una guitarra.Un abrazo.

PD:Me encanta la foto que tienes como avatar del viaje de Chihiro :)

Cicatrices dijo...

Me encanta el escrito ! Y la guitarra está buenísima. Te deseo lo mejor y te sigo (: Un besoo !